Tenemos claro que la infidelidad se entiende como la traición afectiva que cometemos en contra de la persona amada, lo cual provoca en el infiel que sus sentimientos, pensamientos, emociones y placer sexual se centren en una tercera persona, distinta a su pareja estable. Sin embargo, a partir de los niveles de intensidad que alcance esa relación, según se desprende de los aportes de Thompson (1984) en las relaciones pueden clasificarse en tres tipos:
De fuerte lazo emocional, pero no sexual: implica una relación de tipo afectiva. Ésta se da cuando uno disfruta, y se goza más con la compañía y la conversación de una persona distinta a su pareja. La relación con la tercera persona, inicialmente, puede resultar solo de tipo afectivo, es decir, no implica tener relaciones sexuales. Sin embargo, de prolongarse en el tiempo puede pasar a un nivel más intenso.
Sexuales pero no emocional: se relacionan directamente con una insatisfacción sexual con la pareja.
Según la sicóloga mexicana
Raquel Peisekovicius (1999), se pueden identificar
varios tipos de infidelidad: la consentida, la accidental
y la insidiosa.
La infidelidad consentida.- es un
acuerdo entre un marido y una esposa en donde uno o ambos son libres de
practicar infidelidad sin que el otro cónyuge se sienta ofendido. Puede ser
usada como remedio para mantenerun matrimonio de conveniencia o para romper el
aburrimiento que se ha apoderado en la pareja. Suele darse con mayor frecuencia
entre las personas ricas, creativas, inquietas y que tienen confianza en sí
mismas.
La infidelidad accidental.- ésta se
produce cuando se lleva cabo el acto sexual con una persona distinta
a la pareja, en ocasiones se da sólo por curiosidad, por
experimentar nuevas fantasías, sólo por placer, o simplemente como resultado
dejarse llevar por las circunstancias y sensaciones que rodean algún encuentro
furtivo, tras alguna reunión social, reencuentro entre amigos, etc. Es
muy fácil de darse cuando una persona propensa a esta conducta se encuentra en
un ambiente diferente del habitual en compañía de otra sexualmente atractiva. Hay
parejas que se refrenan a sí mismas por miedo a ser descubiertas, pero ceden
cuando la oportunidad se presenta y piensan que el peligro no existe.
La infidelidad insidiosa.- ocurre cuando otros aspectos de infidelidad se unen a la infidelidad sexual. Cónyuges metidos en amoríos atestiguan que lo que había empezado como un simple encuentro se transformó más adelante en interdependencia y enamoramiento. Si la experiencia sexual es gustosa, cada repetición estrechará el lazo de interdependencia. Es comprensible que, entre más tiempo se prolongue una relación, mas difícil es acabar con ella.
Hay otros tipos de infidelidad como por ejemplo: por ausencia; la platónica; la intencional, la compulsiva y la estable.
Por ausencia.- esta infidelidad se presenta cuando la pareja busca satisfacer con otra persona esa carencia afectiva, emocional y de práctica sexual que no satisface en su propia relación de pareja.
Infidelidad platónica.- es un tipo de infidelidad que se construye, se procesa sólo en la mente de la persona que la padece. Es un tipo de relación que no se materializa. Se entiende como una relación fantasiosa que construye alguien con un personaje del sexo opuesto que pertenezca a la farándula o a un circulo social al que cueste dificultades ingresar por los preconceptos y demás.
Infidelidad intencional.- es aquella que se gesta con pleno conocimiento, con la intención de constituir una relación de pareja externa al matrimonio. Ésta puede gestarse en dos direcciónes, una, cuando la persona se lanza a la conquista amorosa y afectiva de alguien del sexo opuesto; y otra, cuando la persona propicia las condiciones para que el otro se fije en ella e inicie el proceso de conquista, en este caso envía señas a través de la coquetería para atraer la atención del otro.
Infidelidad compulsiva.- es aquella que se presenta cuando una persona no puede controlar sus deseos de conquista e inicia una, dos tres y más relaciones, solo con el interés de mantener récords en números de conquistas, sin preocuparse por los sentimientos del otro y de los daños que pueda generar en la otra persona. Los infieles compulsivos pueden verse afectados por enfermedades sexuales, debido a su vida promiscua.
Infidelidades estables.- ésta se presenta, como su nombre lo indica, cuando una relación de infidelidad se prolonga en el tiempo y se constituyen como una segunda relación de pareja “normal”, con hogar propio, hijos y hermanos. A este grado de estabilidad de una relación de infidelidad se llega por la actitud pasiva y permisiva del cónyuge.
Cualquiera que sean los tipos de infidelidades, como creyentes debemos rechazarlas, porque las mismas atentan no sólo contra la dignidad del sacramento, el cual fue constituido y bendecido por el mismo Jesús, en presencia del sacerdote, porque viola el juramento realizado al llegar al altar, sino que,además, se constituye en acto de irrespeto a la pareja a quien de manera libre le habíamos garantizado amor exclusivo durante toda la vida; pero además atenta con nuestra propia dignidad, porque el infiel, con su actuación, denota su incapacidad de cumplir con los compromisos adquiridos. La infidelidad destruye no sólo la confianza hacia los otros, sino que termina generando graves problemas que amenazan la estabilidad de la vida.