“Por
eso el hombre dejará a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y serán los
dos una sola carne”. Génesis 2,24
Esta cita bíblica la cual hemos leído y escuchado muchas
veces, y que condensa el ideal de todo
matrimonio, nos compromete a cuatro
cosas:
- Construir un proyecto de vida independiente.- Esto
significa que las parejas, una vez toman la decisión de unir sus vidas, deben conformar
un espacio independiente, alejado de
toda injerencia familiar. No es sano para la relación de los nuevos
esposos convivir con los progenitores,
hermanos o tíos de alguna de las partes. Y no es sano por la intromisión de
terceros que siempre tomarán partido en
favor de su ser querido. Además no es sano
porque no es lugar apropiado para construir su propio patrimonio. sólo
viviendo en un espacio íntimo pueden construir ese patrimonio.
-
- Implica que como pareja den a los demás
miembros de la familia el puesto y el valor que le corresponde.- Dice la cita, “dejará a su padre y a su madre,
y se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne.” Es decir, el sacramento es un regalo de dios
por lo tanto Él es el primer invitado y después de Dios estará mi pareja
siempre. Insisto la pareja ocupará el
puesto más importante en la vida de los casados, después de Dios. Los padres, los hijos, los hermanos ó amigos,
no estarán jamás por encima de la persona con la que he decidido compartir el
resto de mi vida.
Implica amor exclusivo.- “serán
los dos una sola carne.” No dice serán tres ó cuatro una sola carne, sino dos.
Es decir no es admisible, no cuenta con la bendición de Dios, no permite un
crecimiento personal, que uno de los miembros de la pareja caiga en la
infidelidad. Este acto en la experiencia del matrimonio es inadmisible.
- Implica tener palabras y actitudes que
reafirmen el amor y la unidad de la relación.- Es sano,
conveniente
para los esposos expresarse amor. Tener palabras y actos de ternura.
¿Qué se puede hacer para
salvar un matrimonio en crisis? Se debe
aclarar que no hay una fórmula ni una regla que pueda ser aplicable para todos
los matrimonios en crisis, cada realidad requiere un tratamiento especial. Es más en algunos
casos, cuando los matrimonios han caído en actos de violencia física ó psicológica
o violaciones lo más conveniente es sugerir un proceso de separación. Sin
embargo, si las partes deciden darse una nueva
oportunidad, se sugieren las siguientes
posibilidades:
1.- Amor y perdón.- 1Pedro 4,8 nos recuerda que el amor capaz de perdonar siempre y cuando la persona
que ha fallado asuma un compromiso de
enmendar su error.
2.- Transparencia y
honestidad. No hay dudas que la transparencia y la honestidad deben
caracterizar los actos de toda relación. Solo de esta manera podemos ganar la
confianza mutua. La pareja ha de estar
segura que lo que dice su cónyuge es verdad.
3.- Dejarse guiar por la luz
de Dios y no por las propuestas del mundo. Romanos 12,2.
4.- Reconocer que en el adulterio todos pierden.
Pierden los esposos, los hijos, se pierde el patrimonio material construido con
base en años de esfuerzo.
5.- Mantener la paz y la
alegría y saber pelear.- Esto se
consigue sólo con la oración. Filipense
4,4-6
6.- Dar lo mejor por su pareja siempre.
Efesios 5,25.
Pido a Dios que bendiga a
todos los matrimonios con dificultades para que encuentren luces que le
permitan iniciar un nuevo camino que los conduzca a el amor, la reconciliación
y la paz.