La psicología se ha dado a la tarea de investigar y agrupar los elementos característicos de las personas a las que les cuesta entablar relaciones de pareja basados en el amor duradero, respeto por el otro y la fidelidad y se han encontrado aspectos interesantes que pueden ayudar a comprender las razones por la que algunos caen frecuentemente en actos de infidelidad.
Se ha detectado por ejemplo que un alto porcentaje de infieles son narcisistas, y al hacer gala de ese narcisismo tienden a mostrarse como galanes (aunque no
lo sean), conquistadores y seductores. Todo desligando su parte sentimental de su interés meramente racional
de demostrarse que sí son capaces de
conquistar a alguien y hacerlo su pareja así sea por un tiempo limitado, porque
al infiel no le interesa prolongar en el tiempo una relación. La persona infiel
es egocentrista, por consiguiente
sólo busca su satisfacción personal, por lo que poco le interesa o poco
le afecta lo que pueda ocasionar emocionalmente a la otra persona.
Para
John Bozlby, muchos infieles han desarrollado lo que llamó Teoría del Apego, y en
la que se explica que aquellos individuos
que durante su infancia han experimentado situaciones de apego inseguro, en la edad adulta pueden desarrollar algunas de las siguientes características, que se manifiestan más claramente entre
quienes son infieles:
El apego ansioso.
Las
personas que desarrollan estas características son incapaces de controlar sus impulso por lo
que se dejan arrastrar fácilmente por la fuerza del deseo, experimentan una insatisfacción constante por eso permanecen
en búsqueda de nuevas experiencias, se esfuerzan por agradar y les cuesta sobreponerse al rechazo de
su pareja lo que denota un gran complejo de inferioridad y la búsqueda de
nuevas relaciones es una manera de reafirmarse. Las personas con este tipo de
apegos son más celosas.
Apego evitativo.
Estas
personas establecen pocas relaciones, no
son expresivas emocionalmente, se
muestran frías, son esquivas, agresivas,
en ocasiones intolerantes y desarrollan relaciones de pareja
conflictivas. Para ellos
un acto de infidelidad no tiene
la misma carga negativa o impacto adverso
para la familia que para el común de la
gente porque les parece algo normal y manejable, por consiguiente no
establecen ni construyen relaciones duraderas.
Apego desorganizado
Las
personas con este tipo de apego son inestables emocionalmente, tienen comportamientos
impredecibles. En ciertos momentos disfrutan
algunas experiencias y en otros los rechazan. Es difícil que sean comprendidas
por la contraparte, mucho más por su pareja, son desorganizados.
A
partir de las investigaciones del dr. John
Bozlby, se puede concluir que son múltiples los aspectos que pueden llevar a un individuo a
desarrollar comportamientos de infidelidad,
sin embargo como nuestro interés no es
justificarla sino tratar de encontrar qué cosas la propicia para tomar correctivos
diremos qué se puede hacer.
¿Qué hacer?
- Primero hacer público estos estudios para que la gente conozca las
razones psicológicas que llevan a un individuo a ser infiel.
- La persona infiel debe
ser capaz de auto confrontarse, es decir, debe reconocer que ser infiel no es
un comportamiento normal.
- El infiel debe reconocer
que tiene un problema y que con ese problema está afectando a su núcleo familiar.
- Como ser racional tomar consciencia que puede salir de ese
circulo vicioso que ha provocado caos en su vida.
- Debe saber que ha provocado heridas que deben ser sanadas
y este se logra solo con el tiempo.
- Dar el primer paso, romper con el tercero, y
comprometerse con su pareja para recuperar
el tiempo perdido.
- Buscar la ayuda de Dios y de la ciencia a través de la
psicología.
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